Tal como he venido exponiendo desde hace tiempo, mucha gente ya conoce sobre la importancia y las bondades de la diversificación, siendo éste un axioma básico en finanzas.
La diversificación es un instrumento idóneo para reducir el riesgo de las inversiones, circunstancia esta que está demostrada matemáticamente.
Dicho esto, es importante conocer que a la hora de invertir existen tres factores que influyen en la consecución de los objetivos financieros en cuanto al rendimiento esperado de una cartera de inversión. En concreto son:
- Asignación porcentual de la cartera de inversión a cada clase o tipología de activo (asset allocation). Es decir, la distribución porcentual en que dividimos nuestra cartera de inversión entre las diferentes tipologías de activos.
Por ejemplo: definir un portfolio compuesto por un 45% Renta Variable (RV) gran empresa, 25% Renta Fija (RF) corporativa, 15% Fondos Real Estate, 10% Renta Fija (RF) High Yield y 5% Fondos de Commodities,
- Selección individualizada de activos concretos dentro de la cartera de inversión (security selection). Así es, qué valores concretos componen nuestra cartera de inversión.
Por ejemplo: Dentro de la Renta Variable (RV) gran empresa seleccionamos entre otros valores: Nestlé, Apple, Telefónica, HSBC, Alphabet, Daimler, Aegon, … (Títulos nombrados únicamente a título enunciativo)
- Instante específico de mercado correspondiente a la realización de la inversión (market timing). Es decir, en qué momento concreto accedemos al mercado para entrar nuestras órdenes específicas de compra de títulos.
Por ejemplo, hemos recibido una herencia y decidimos en qué momentos o plazos se va a ir invirtiendo, en lugar de hacerlo todo de golpe.
¿Cuál de los tres factores es el más determinante?
Cuando estoy con personas que se mueven en el mundo de las inversiones, les acostumbro a preguntar su opinión al respecto de qué factor de los tres explicados, es el más importante para ellos.
Y el resultado es similar, a cuando preguntas a tres abogados por un tema concreto; que acabas recibiendo 5 opiniones distintas.
Seguramente si le preguntamos a un “Day trader”, es decir, a un operador que realiza trading en intradiario, nos contestaría que para él, el factor más determinante es el market timing, es decir, el momento concreto de realizar la orden a mercado. Lo cual tiene mucho sentido.
Pero si en lugar de realizar una actividad de especulación o trading, actividad que desaconsejamos a no ser que seas un profesional del ramo; nuestro propósito es desarrollar una estrategia de inversión a largo plazo, la cosa cambia. Ya no es tan determinante el instante específico de mercado.
Para esta vocación inversora, de acuerdo con la opinión de las personas más expertas en el mundo de las inversiones tales como Ray Dalio, o John Bogle, entre otras; el factor más determinante de largo entre los tres, es la asignación porcentual de la cartera de inversión a cada clase de activo (asset allocation).
En consecuencia, si quieres ver cumplidos tus objetivos financieros a largo plazo, presta muchísima atención a cómo y en qué proporción diversificas ampliamente tus inversiones entre las diferentes clases de activos y plazos. Este es el factor más determinante de todos.
En Newman mantenemos una vocación inversora basada en el largo plazo, por lo que tenemos muy presente las anteriores conclusiones citadas por los inversores más exitosos y reputados.